martes, 17 de noviembre de 2009

El origen de la vocación


Hace unos años cuando aun estudiaba la carrera, una mujer se me acerco a preguntarme qué estudiaba, la respuesta fue certera, — biología — conteste. Mi respuesta no fue dudosa, pues estaba tan seguro de lo que estaba estudiando, que para mí, no había dudas, el problema su suscitó cuando ella inmediatamente lanzó la segunda pregunta. ¿Y eso qué es? Al parecer, yo sabía qué era, pero me resulto un tanto difícil tratar de explicarlo, (no hay libros que lo expliquen claramente y mucho menos que digan como explicarlo). ¿Dónde vas a trabajar? Fue la tercera pregunta, nuevamente titubee y por temor a que pensara que ni siquiera yo sabía lo que estaba haciendo, comencé a dar una serie de respuestas que aun pienso que la dejaron mas confundida de lo que pudo estar en un principio, el problema más grave fue cuando me di cuenta que no sabía cómo explicar lo que era, a qué me dedicaba, o a qué me dedicaría en el futuro. Pudo haber resultado fácil decir que un biólogo es aquel que trabaja en un laboratorio, y quizá ella pudo haber pensado que el trabajo se reducía a análisis clínicos o químicos. Pude también haber dicho que un biólogo es aquel que estudia a los animales, entonces ella lo habría relacionado con la veterinaria. Otra opción sería decir que los biólogos son los que estudian las plantas, como un agrónomo o un jardinero. O alguien que hace secuencias de ADN o realiza estudios de impacto ambiental. (a veces esas frases confunden más de lo que se pretende). Cualquier respuesta que hubiese dado en ese momento, no dejaría a ninguno de los dos completamente satisfechos. Ella con una escolaridad básica y yo con una licenciatura a punto de terminar resultó ser el impedimento para una explicación clara. Me sentí vacio por un momento. Cómo era posible que no pudiese describir mi profesión. A partir de ese momento descubrí mi vocación, la divulgación de la ciencia. Ella se retiro deseándome suerte y yo con una interrogante ¿Qué es un biólogo? Luego de esa pregunta me surgió otra y luego otra, y así han venido surgiendo nuevas como ¿Qué es la biología?, ¿Qué es la ciencia?, ¿Qué hace un científico? Y muchas más. Mi formación como divulgador de la ciencia tiene ese origen y desde aquel día trato de explicar y explicarme con palabras sencillas, de manera amena y con sencillez, qué es la ciencia, en su conjunto y de manera específica. El lunes pasado falleció aquella mujer. Este es un homenaje a la mujer que me ayudo a encontrar mi vocación. Una mujer sencilla que me brindó una charla de calle, de esas de cinco minutos que marcan por un buen rato, me hubiera gustado responder claramente a sus preguntas. Por ahora solo puedo responder… sigo intentando encontrar la respuesta.

2 comentarios:

Rodrigo G. dijo...

Vaya, ¡Qué historia!. Qué gusto de verdad que publiques este tipo de historias no ficticias, son momentos que perduran y hacer un homenaje al momento es muy inspirador. Como toda explicación que pudiste haber dado, pudo pasar que abarcaras muy poco o abarcaras demasiado (y no todo) de lo que trata en sí la Biología. Felicidades. Att: Rodrigo Gaytán (el chavo del metro estudiante de Biología).

Octavio Hernández dijo...

Rodrigo G. Las historias y las experiencias son las que nos nutren. Como cuando platicamos en el metro.
Saludos. Gracias.